22 de enero de 2013

Salvemos a los "condenados" de Talaván



   Fotografía de Eloy Díaz Redondo

Los “condenados” de Talaván (Cáceres), conocidos mediáticamente como los “ángeles malos” a raíz de que un popular programa televisivo inventara esta denominación, corren un serio peligro. Se trata de unas pinturas murales que cubren la bóveda de la capilla del cementerio viejo de Talaván. La factura técnica es vulgar, pero cabe valorar su antigüedad (van camino de cuatro siglos) y, ante todo, su rareza, acaso sin parangón iconográfico. Sobre un friso caligrafiado cuya leyenda hace referencia al sacrificio de Cristo, desfilan una veintena de figuras grotescas: los “condenados”. Sus alas nos quieren indicar que son almas; sus rostros horribles, de dientes afilados y expresión terrorífica, que estas almas pertenecen a réprobos con destino al infierno. Todas las cabezas visten unos gorros enigmáticos, de apariencia festiva, acaso a modo de capirote penitencial. Un mural curiosísimo, en definitiva, digno de estudio, pero sobre todo digno de conservación, porque forma parte de nuestra riqueza patrimonial.
Tuve ocasión de visitar recientemente el cementerio viejo de Talaván, constatando el gravísimo deterioro que sufre la capilla, alzada con piedras de pizarra y mortero. Quizás los agentes atmosféricos la destruyan este mismo año, sin esperar al siguiente invierno. Se hace precisa, con urgencia, alguna medida de protección al respecto, siquiera para evitar que la lluvia y la nieve den la puntilla a esta ya ruinosa capilla. Quiero aprovechar este espacio para enviar un mensaje de alerta a quien corresponda, desde el ayuntamiento talavaniego a las autoridades patrimoniales. Y también para apelar a la sensibilidad de particulares e instituciones, invitándoles a compartir esta petición: salvemos a los “condenados” de Talaván.
por Gabriel cusac

4 comentarios:

elpresley dijo...

Te mando lo mismo que le comentaba a Carmen Béjar:

Me parece lamentable dejar perder esa bóveda tan antigua. Con unas grapas y una resina epoxi se aguantaría otros cien años.

Con respecto a los "condenados", da la impresión de que se hubieran pintado posteriormente y por alguna mano ajena los gorritos y los dientes ya que el contorno de estos tiene un color en rojo inglés mucho más fuerte que el resto de las pinturas que decoran la bóveda. Tampoco se ha deteriorado el trazo. El recinto tiene todo el aspecto de haber sufrido el vandalismo de los grafitti (pintadas en verde) y los gorritos y los dientes pueden ser resultado de lo mismo. No sé. A lo mejor estoy diciendo una barbaridad pero .......

Un saludo.

Gabriel Cusac dijo...

Tengo muy en cuenta tu opinión. Si te fijas en los motivos geométricos del esgrafiado, guardan un espacio sobre la cornisa que no tendría sentido vacío. Es decir, parece hecho a propósito para alojar lo que en este caso serían las pinturas de los "condenados". En consonancia, además, con la leyenda del friso. Pero que no sean originales explicaría muchas cosas, como su falta de referente iconográfico, su ejecución vulgar, la viveza de los colores. O sea, que puedo darme un batacazo como el del diablo cojuelo. De todas formas, como ya he revuelto Roma con Santiago, espero que pronto tengamos la respuesta.
Un saludo, y gracias por tu opinión.

Unknown dijo...

Salvemos este tipo de cosas... Desdeluego nos cargamos la historia...

Gabriel Cusac dijo...

Lo salvaremos, Borja. Ya somos muchos los que estamos empeñados en ello, y la campaña avanza con pasos de gigante.